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Isabel Negro
COMPARATIVA CINEMATOGRÁFICA
Vértigo y El gabinete del Doctor Caligari
En 1958 se estrenó Vértigo, un film que constituye uno de los grandes hitos de la historia cinematográfica, dirigido por el gran maestro del terror y el suspense Alfred Hitchcock. Basada en la novela de Pierre Boileau y Thomas Narcejac, titulada " D'etre les morts" (1954). Cuenta con grandes nombres entre su reparto, como es el caso de James Stewart.
Hitchcock nos plantea una historia rocambolesca protagonizada por un detective que en su labor de seguir a la mujer de un viejo amigo casi termina perdiendo la cabeza. La película expone reflexiones acerca del deseo, de los traumas, de los ideales, pero sobre todo de la gran incidencia inconsciente que el pasado tiene sobre el presente, convirtiéndolo en una completa pesadilla.
¿Qué tiene que ver todo esto con "El Gabinete del Doctor Caligari"?, para empezar, la primera similitud la observamos en lo que se refiere al género cinematográfico, ambas películas pueden encuadrarse dentro de la categoría de cine negro, de hecho esta obra de Robert Wiene estrenada en 1920, es considerada por muchos como la primera película de terror, y es que fue toda una revolución para su época, al igual que Vértigo, películas adelantadas a su tiempo que impulsaron una nueva manera de entender el hecho cinematográfico. Los sorprendentes giros de la trama y las manipulaciones temporales serán toda una innovación cinematográfica. Wiene fue uno de los pioneros en romper con la estructura narrativa lineal dentro del espacio cinematográfico, años más tarde grandes directores como Hitchcock se harán eco de su hazaña.
Si bien es cierto que el término cine negro es muy amplio, podríamos matizar más en la clasificación de ambas películas, siendo Vértigo más bien un film de suspense e intriga y la obra de Wiene, de terror. Además ambas ofrecen estéticas muy distintas, la de Caligari mucho más grotesca y lúgubre, acentuada musicalmente por acordes distorsionados y ritmos en espiral, mientras que vértigo muestra la sociedad de finales de los 50, a través de la utilización de primeros planos en muchas ocasiones, así como el uso de escenas casi monocromáticas (hacia el final, observamos a Judy en la habitación del apartamento donde se hospeda. La estancia esta invadida por un verde fluorescente que proviene de un cartel luminoso de la calle, provocando un efecto casi fantasmal)
De este modo, cabe decir que ambas películas experimentan grandes cambios de guión que dejan al espectador desconcertado, así como la propia confusión espacio-temporal, a través de la cual se acentúa dicho desconcierto, gran recurso para mantener el suspense.
La presencia de la "locura" y el manicomio como tópico recurrente dentro del cine de terror, también estará presente en ambos films, el propio protagonista de la obra de Wiene se define como un "loco hipnotista" que utiliza a un sonámbulo para cometer crímenes, mientras que nuestro detective "Scottie", víctima de sus vivencias del pasado y sus traumas está al borde de perder la cordura, llegando incluso a entrar en estado de shock.
Acaba convirtiéndose en un "loco obsesionado" que persigue a una mujer que no existe y existe a la vez, estableciendo un diálogo entre realidad y ficción a través del cual se tambalea, para finalmente desplomarse al vacío.
Por otro lado, El gabinete del doctor Caligari no solo es célebre por su gran giro de guión, y por las confusiones realidad-ficción ya mencionadas, sino que además construye toda una estética lúgubre a través de formas góticas, escenarios oscuros y ángulos puntiagudos que será crucial para artistas del futuro, como es el caso de Tim Burton, que a través de esta estética se ha forjado todo un ideal de animación basado en estas características propias del cine expresionista alemán, el cual ofrece un gran reflejo de la sociedad alemana, devastada tras la Primera Guerra Mundial (1914-18).
Sin embargo, el personaje masculino no deja de plantearse en sus inicios como un héroe salvador, al igual que ocurre en numerosas películas cuya función principal es salvar al personaje femenino, reduciendo el papel de esta, en la mayoria de ocasiones a una simple víctima, o trofeo del verdadero protagonista masculino.
Para finalizar, es interesante analizar el papel de la mujer en esta obra de Hitchcock, el tópico de femme fatale y su desbordante misterio, deseada por el detective, se obsesiona con ella hasta un punto enfermizo, dejará de ser el compás moral de la historia para convertirse en un desquiciado protagonista. Este hecho puede ponerse en relación con una teoría de Freud, "Más allá del principio del placer" a través de la cual constata que existe una tendencia que muestra como en ocasiones una persona se siente más atraida por el dolor que por su propio bienestar. De modo que su búsqueda de placer pase por el sufrimiento, esto fue denominado por Freud como "pulsiones de muerte", y lo que motiva esta elección, es por lo general, un trauma. El sujeto se convierte en un ser de tendencias autodestructivas que cae y recae en sus mismas pesadillas.
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